Fue hasta 1991 cuando una de sus hijas identificó a este hombre como August Landmesser, un trabajador de los astilleros de Hamburgo. Se dice que la Gestapo lo detuvo en 1938 acusándole de tener relaciones sexuales con judíos. Este hombre fue miembro del Partido Nazi desde 1931 hasta 1935, pero fue expulsado del partido después de casarse con una mujer judía llamada Irma Eckler. Después del nacimiento de sus dos hijas, fue enviado a la cárcel por «deshonrrar a la raza». De su mujer, se cree que fue detenida por la Gestapo en la prisión de Hamburgo y sus hijas (Ingrid e Irene) fueron separadas. A Ingrid se le permitió vivir con su abuela materna, mientras que Irene fue llevada a un orfanato y más tarde adoptada por una familia.
Según un dato publicado por The Washington Post, una vez que Landmesser salió de prisión en 1941 fue enviado a la guerra, pronto se le declaró como desaparecido en combate y fue dado por muerto. En 1996, una de las hijas del protagonista, Irene, escribió acerca de su aventura familiar en Alemania, con el fin de poder compartir la desgarradora historia de su familia, separada por el régimen nazi. Mientras tanto August ha pasado a la historia gracias a la famosa fotografía.
Fuentes:
periodistadigital.com
erroreshistoricos.com