Las primeras imágenes efectuadas en 1898 por Secondo Pía, demostraron que la imagen es un negativo fotográfico natural, éste fenómeno ha sido comprobado en numerosas ocasiones hasta el momento actual sin encontrar una explicación lógica. Según las numerosas investigaciones realizadas no han aparecido restos de pintura o material orgánico alguno. Popularmente se cree que la imagen aparecida es el cuerpo de Jesús de Nazaret tras ser crucificado.
Los análisis realizados por Gilvert Raes, del instituto de tecnología textil de Gante, en 1973 confirmaron que correspondían a tejidos existentes hace 2.000 años. Fue tejido a mano y medía 430 cm. de largo por 110 de ancho. Sólo se encontraron algunas hebras de algodón, pero ni el más mínimo resto de pelo de animal alguno por la prohibición de la ley mosaica de que en un telar se mezclen fibras vegetales y animale. El hecho de encontrar algunas hebras de algodón ha servido a algunos investigadores para precisar su procedencia pues en Europa no se cultivaba, aunque sí que se hacía en Oriente Próximo, por lo tanto, en Palestina.
Fuente: cuanticas.com